Service Design: cómo generar experiencias WoW
¿Qué es Service Design?
En el mundo hipercompetitivo en el que vivimos, y que cada vez avanza más en este sentido, la lucha por destacar ante los ojos de nuestros clientes ya transciende el producto, precio, facilidades de pago, envío y hasta la marca. Los consumidores valoran algo por encima de todo esto: hablamos de la experiencia.
Service Design es un enfoque que se encarga de orquestar, de manera integral, todos los elementos involucrados en la experiencia de un usuario con la empresa; haciendo foco, principalmente, en ofrecer un servicio de excelencia.
Involucra muchos procesos creativos para conseguir la mejor experiencia posible, a la vez que busca constantemente la retroalimentación o feedback que van dando los usuarios que pasan por ese proceso. Sin embargo, no se limita a las cuestiones técnicas, sino que busca comprender las emociones, comportamientos y expectativas del usuario.
Diez principios clave del Service Design
Según la Birgit Mager de la organización Service Design Network, hay diez principios básicos a seguir si queremos tener una mentalidad de servicios en un proyecto. Estos son:
- Mirar tu producto como un servicio
- Pensar en el beneficio del consumidor
- Insertarse en el mundo que rodea al cliente
- Ver más allá del servicio: antes, durante y después
- Diseñar pensando en la experiencia del cliente
- Asegurarse que el servicio sea evidente y percibido
- Evaluar la performance del servicio que ofrecemos
- Crear un ambiente y estándares flexibles, para que los distintos agentes y elementos involucrados puedan y sientan ganas de mejorar: Algunos actores pueden estar en:
- Canales digitales
- Canales tradicionales
- Empleados
- Partners
- Atención al cliente
- Ventas
- Tecnología y procesos aplicados
- Producto o servicio
- Crear un producto vivo, en constante cambio
- ¡Sé entusiasta!
Con todo este panorama, ahora podemos entender cómo el enfoque de Service Design nos permite tener una mirada integral de todo lo que atraviesa un cliente a la hora de relacionarse con una empresa. Esto no se limita simplemente a las acciones digitales que un usuario realiza, o al momento en el que contacta con atención al cliente, sino alinear todos los impactos bajo una misma entrega de servicio.